viernes, 31 de octubre de 2008

CLÍMAX

Busca tranquilidad y alejarse –aunque sea por unos pocos minutos- de toda la realidad. Se encuentra perturbada, angustiada. Vulnerable.
Se dirige hacia donde la llevan sus pies…
Está sentada frente al río que luce de color azul está vez. Rápidamente se recuesta bajo el sol. Mira hacia arriba y un cielo celeste cubre toda su vista. Se quita los lentes negros que lleva y cierra los ojos por unos instantes. Los abre y los cierra de nuevo. Los vuelve abrir y los cierra otra vez y así una cuantas veces lo hace hasta que con un simple parpadeo consigue ver la imagen del sol por doquier.
Saca de su morral una cajita de color verde. La observa y la abre al mismo tiempo para sentir el aroma que allí guardan unos cuantos cigarrillos mentolados. Toma uno y lo manipula con sus dedos hasta encontrar un encendedor en uno de sus bolsillos. Como de costumbre le cuesta encenderlo.
Hace una pitada larga y luego juega con la voluta efímera.
Su cuerpo se envuelve de una fuerza inexplicable. Un intenso placer la invade. Siente un temblor muy parecido a un hormigueo que se expande sobre ella por completo. Se olvida de TODO. No alucina, pero está completamente embelesada por las imágenes que percibe. Sigue recostada, ya que tiene ese cosquilleo constante.
Levantarse le provocaría un terrible mareo y no podría sostenerse fácilmente. Pareciera que arrastrara tremenda borrachera, pero solamente trata de recordar el sabor de unos cigarrillos mentolados.
Da la última pitada y se relaja tanto que cree estar levitando. Se queda mirando el cielo por un rato largo hasta que se levanta, se coloca sus lentes negros y sigue su rumbo como si nada hubiese pasado.



NATI:D

1 comentario:

palita dijo...

Nachiiiiiiiiiiii, te dije que hace mal fumar porri, esta chica desobediente que no hace caso. Te voy a tener que dar un chirlo, mirá como alucinas jjajjajajajajjajajja sabés que te quiero ^^
Ahora hablando en serio, que escritora esta Natalie!!!!!!!!!!